ADHESIVOS PARA CONGELADOS

Empezamos hablando de adhesivos, con el post sobre distintos tipos de adhesivos, en el que explicábamos de qué se componen los adhesivos y los distintos grupos que existen, y a continuación os hablamos en otro post de los adhesivos enológicos.

Siguiendo con este hilo, en este caso, vamos a  desarrollar las características de los adhesivos para productos que han de pasar por un proceso de congelación, situación en la que no sirven los adhesivos habituales.

También existen diferencias, y no se debe utilizar el mismo adhesivo, si el producto se va a congelar con la etiqueta ya adherida, o si va a pasar por el proceso de etiquetado con el producto ya congelado.

Un adhesivo que se utilice en productos que se van a congelar , debe tener una fuerte adhesión inicial y final, y buena cohesión con el material de la etiqueta para que no se desprenda durante el proceso de congelación o descongelación.

Estas características son fundamentales, ya que es necesario que la etiqueta quede bien adherida desde el primer momento, y que no se desprenda durante el proceso de congelación pese a estar en contacto con agua y hielo, ni tampoco en el proceso de descongelado posterior. Con estos adhesivos especiales se evita que pueda perder sus propiedades con las bajas temperaturas, ya que el adhesivo también puede congelarse. La adhesión final es fundamental ya que el producto puede llegar incluso a sufrir una ligera descongelación debido a los cambios de temperatura durante los traslados.

Estos adhesivos están hechos para aguantar temperaturas de hasta -35º C. Existen adhesivos que soportan temperaturas superiores, pero son formulados especialmente.

Si quiere saber más sobre estos adhesivos especiales para congelados, estaremos encantados de atenderle.

Imagen obtenida de besana.es

ADHESIVOS ENOLÓGICOS

Hace unos meses explicábamos en un post los elementos que componen un adhesivo, los términos que se utilizan para hablar de ellos, y los grandes grupos en los que se dividen.

En este post y el siguiente, vamos a hablar más detalladamente de dos de esos grupos: los adhesivos enológicos y los de productos congelados.

Empezaremos por los enológicos, dejando para el siguiente post los congelados.

Los adhesivos de las etiquetas de las botellas de vino deben tener una fuerte adhesión inicial y final como ya comentamos en el post anterior. Esto se debe a que las botellas de vino en la mayoría de los casos, deben soportar bajas temperaturas, humedad e incluso en algunos casos inmersión durante algún tiempo en agua-hielo. Pero cuando llega a nuestra mesa, la etiqueta de vino debe seguir perfectamente pegada a la botella para que se mantenga la imagen del producto y podamos ver además, en qué zona se ha producido, el tipo de uva, el % de alcohol, los maridajes...

Por ello siempre se utilizan adhesivos permanentes o superpermanentes, dependiendo de si se espera que el vino pase más o menos tiempo expuesto a la humedad o el agua.

• Los hay especialmente diseñados para adherirse al vidrio y que garantizan la resistencia a la inmersión en agua por un periodo máximo de 4 horas según los test realizados.

• Existe otra clase desarrollada para el lavado con agua alcalina para envases de vidrio recuperable, que facilitan que la etiqueta se despegue a la hora de reciclar el envase. Estos adhesivos son menos recomendables para la inmersión en agua-hielo, ya que igualmente puede      desprenderse también la etiqueta de la botella durante su uso sin que lo deseemos.

• Un tercer tipo se ha desarrollado especialmente para frontales sintéticos o plásticos, siendo el adhesivo totalmente transparente, favoreciendo la imagen de no label en el packaging

La temperatura que soportan de media estos grupos de adhesivos oscila entre los -5º y los 60º C, pudiendo llegar algún adhesivo especial hasta los -25º.

Imagen obtenida de alibaba.com

Aunque los materiales no son tema de este post, viene al caso comentar que existe un material especial para bebidas que deben pasar grandes periodos de tiempo a temperaturas bajas, llegando incluso a la inmersión.

La particularidad de este material es que entre la superficie y el adhesivo, nos encontramos otra capa de material plástico, que impide que la humedad o el agua llegue directamente al adhesivo, ayudando a que la etiqueta no se arrugue ni se desprenda y manteniéndola intacta por más tiempo que con los materiales convencionales.

En la pasada feria ENOMAQ presentamos un material con adhesivo seco. Este material es especial ya que al desprender la etiqueta, el adhesivo se queda pegado en la botella y la etiqueta queda libre de residuos. Explicaremos más detalladamente este material en próximos post.

Esta tecnología se puede aplicar también a otras bebidas como las cervezas o los licores, productos que también pasarán por un proceso de enfriamiento o reciclaje,y que quieren mantener su etiqueta en óptimas condiciones hasta el momento de su consumo final.

Si necesitas asesoramiento o más información sobre los adhesivos o materiales enológicos, contacta con nosotros.

Y no te pierdas el próximo post sobre adhesivos de congelación.